Las excavaciones en Egnatia seguramente seguiran durante varios años más, pero lo que se ha excavado se puede visitar en un parque arqueológico, que también incluye un pequeño museo.
A continuación una selección de lo que se puede ver:
Murallas
La primera fortificación, construida entre los siglos 13 y 12 aC, se compone de un muro que protege el asentamiento en el lado tierra. De esta muralla sólo se ha encontrado los dos extremos.
La muralla final de la ciudad rodea un área de 402.000 metros cuadrados con no sólo las zonas residenciales y casas dispersas, sino también una amplia zona libre, que podía salvar humanos, ganado y campos en un caso de guerra, de modo que pudieran resistir un largo asedio.
Instalaciones portuarias
Bajo el dominio romano el antiguo fondeadero ya no estaba adecuado. También hubo cambios en el litoral. Por lo tanto construyeron en la bahía del noroeste de la Acrópolis un nuevo puerto. El nuevo puerto estaba protegido por muros y los dos moles incluyen cerca de 16.000 metros cuadrados.
El llamado Foro
En toda su extensión es un cuadrilátero irregular y se compone de un gran patio 17,5 mx 23,25 m, rodeado por un pórtico con columnas dóricas. Está claro si se trataba del Foro de Egnatia o de un mercado.
Pórtico en forma de L
En el siglo cuatro o tres aC se construyó un pórtico en forma de L sobre estructuras anteriores. Tal vez limitó la agorá helenística. La pared de este pórtico también está pared de la Basílica de Augusto.
La llamada Basílica del Foro
La basílica profana a los pies de la Acrópolis es rectangular con 35 x 21 metros. En su interior tiene una fila circunferencial de columnas y la fachada está dividida en un pórtico de 8 pilares cuadrados que coinciden con el número de columnas en el interior. La basílica fue reconstruida varias veces – al final a una basílica cristiana. En el siglo sexto la basílica fue destruida.
Basílica Epicopal
En la zona al sur de la Via Traiana habían apartamentos, tiendas, talleres, etc., y más tarde 2 basílicas paleocristianas. Una de estas basílicas probablemente era la Basílica Episcopal de Egnatia construida en el siglo quinto. Tiene 40 x 27,70 m y tres naves con un ábside semicircular hacia el este. E la nave derecha se había encontrado restos de mosaicos, que ahora se conservan en el Museo de Egnatia.
El Museo
La exposición permanente del museo ofrece un panorama completo de la historia y la topografía de la ciudad con dibujos, planos, fotografías, fragmentos de arquitectura y mosaicos. Se exhiben artefactos encontrados en Egnatia y sus necrópolis, por ejemplo los mosáicos de la basílica episcopal y de la Basílica del Sur. El museo también incluye una de las tumbas, la «Tomba delle Melagrane» de la segunda mitad del siglo cuarto aC. Se compone de un hall de entrada, una parte al aire libre y la tumba real pintada con estuco, con motivos vegetales y arquitectónicos.
Un tema importante del museo es, por supuesto, la llamada cerámica Gnathia. Al principio se creía que esta cerámica Gnathia y que fue fabricado en Egnatia. Hoy sabemos que Egnazia sólo es una de las localidades de producción. Esta cerámica depende de la cerámica griega de la Magna Grecia de donde vienen las formas más conocidas y más simples: Oinochoe, Pelike, Skyphos, Amphora, crátera de campana, cántaros etc. La superficie de esta ceramica está revestida con una barniz brillante negra. En esta al principio hay escenas figurativas de pintura blanca. Las escenas figurativas rápidamente son remplazados por motivos vegetales de color blanco y de color amarillento. Un motivo característico es una guirnalda horizontal con ramas verticales de hojas de vid, zarcillos y uvas. La cronología de la cerámica Gnathia es controvertida, pero su apogeo era en la segunda mitad del siglo cuarto y al comienzo del siglo tercero aC.